¿No reaccionar es la mejor opción?.

           Se cuenta que dos ranitas cayeron en un balde que contenía leche. Cuando se dieron cuenta de la situación se pusieron a nadar para salir del balde. Luchaban con todas sus fuerzas, pero no lograban zafarse de aquel extraño liquido.
           Una de las ranitas optó por dejar de nadar en cuanto empezó a sentirse cansada, viendo la inutilidad de su lucha. Se hundió en la leche y desapareció.
           La otra ranita optó por nadar hasta morir. Le dolía el cuerpo, pero seguía nadando. Cada vez se notaba mas débil, pero seguía nadando. Sucedió que tanto movimiento convirtió la leche en mantequilla, la ranita se apoyó en ella y de un salto salió del balde.